miércoles, 16 de abril de 2014

CAE OTRO GRANDE TRAS LAS DERROTAS INESPERADAS DEL BARSA

 SIMBADA 0 V. OLD BOYS 5 

Los equipos

SIMBADA
Titi 6
Maseta 5,75 (un poco por debajo de su nivel)
Borja 8 (5 por su juego y 3 por venir enfermo)
Bebe 5 (aunque oralmente jugó para 10)
Oso 7
Negro 7 (era un 8 pero su pelotazo al espectador le restó un punto)
Nico 6
Maxi 6
Juampi 6 

OLD BOYS
Mati 8
Santiago 7
Topo 6
Fede 8
Pato 9
Tony 7
Paul 7
Bene 8
Martin 7
Ale 7 

PRIMER TIEMPO
25 minutos gol de Tony (Old Boys); 33 minutos, gol de Fede (Old Boys)

SEGUNDO TIEMPO
Baile de Old Boys. Tres goles más de Old Boys, de autores desconocidos, según las fuentes de ambos equipos. 

SEMANA NEGRA PARA LOS GRANDES: SIMBADA FUE GOLEADO Y SU VESTUARIO ES UN INFIERNO
En la misma semana en que Barcelona cayó contra Granada por la Liga Española y contra Atlético por la Champions League, Simbada sufrió una goleada sin atenuantes; jugó mal y fue superado en todas sus líneas; la derrota y las discusiones en la cancha produjeron un tembladeral en el plantel simbadense
Por Armando Paredes


Se cumplió un viejo apotegma del fútbol. Los goles que no se hacen en el arco contrario, se reciben en el propio. Pero ayer esa máxima se magnificó ya que luego de un comienzo de 7 minutos arrolladores de Simbada, que estrelló dos pelotas en los palos, el equipo bordó recibió una lluvia de 5 (cinco) goles de los jóvenes jugadores de Old Boys que terminaron imponiendo su juego con un baile ante un Simbada confundido y desordenado en todas sus líneas. Además, las fuertes discusiones internas entre el capitán simbadense, Negro, y los dos marcadores de punta, Maseta y Bebe, dejaron un clima tenso en el vestuario sobre el que deberá trabajar el equipo.




El clima tenso del vestuario





La derrota abultada de Simbada completó el círculo de una semana negra para los grandes. El Barsa había sido eliminado de la Champios League contra Atlético de Madrid y fue vencido por el débil Granada por la Liga. Por eso, Simbada ayer fue batido por Old Boys y entonces sus jugadores se fueron con un consuelo, como dijo Juampi al salir de los vestuarios: “Si Messi perdió… nos tenía que pasar”.



 Habrá que esperar otras semanas más propicias. Cuando el resultado estaba puesto, las fuertes recriminaciones cruzadas en el equipo derivaron en un incidente inédito: Pagani tomó en pleno juego la pelota y la despejó violentamente afuera, por la línea del lateral, al grito de “dejensé de joder”, y el balón dio en un espectador que estaba sentado en la tribuna visitante, que trastabillo, cayó de las gradas y debió ser atendido por los médicos de guardia. El Negro pidió disculpas, pero se retiró ofuscado del campo de juego. Había jugado un partido, con el esfuerzo y el despliegue de siempre, aunque sin tanta claridad.

El capitán construyó uno de sus mejores partidos y estuvo cerca de marcar

El mismo capitan de Simbada estrelló una pelota en el palo a poco de comenzar el partido, a los 7 minutos, con un remate de izquierda a derecha. La pelota dio en la parte posterior del madero. Dos minutos antes, Maxi, de buen partido, intentó sacarse de encima la pelota al estar marcado y probó desde 30 metros con un disparo formidable que dio en el travesaño. Fueron las dos circunstancias más claras que tuvo Simbada y que podrían haber cambiado la historia. Se sabe que Simbada es más defendiendo que atacando.

El Oso fue un motorcito que puso y metió, pero sus esfuerzos no se tradujeron en buen funcionamiento.

Esos dos "no-goles" fueron clave. Agrandaron al rival. Old Boys comenzó a pisar fuerte a partir de entonces, con un conmovedor despliegue de su volante carrilero derecho Pato, que corre y pone por toda la cancha. La seguridad en el fondo de Santiago Raggio y de su back central Topo fueron determinantes, al tiempo que sobresalió el marcador de punta izquierdo, Fede, que desequilibró a Simbada con proyecciones constantes: iba y venía. Precisamente por ahí, por el endemoniado Fede, llegó el primer gol de Old Boys.En rigor, la jugada comenzó con Santiago, que fue apurado por Maxi y limpió la pelota para el intratable Fede, que hizo de carrilero por la izquierda y con su gran velocidad pasó a Maseta, algo estático ayer producto quizás de su reciente viaje a Suiza (el futbol suizo no tiene la exigencia del CNSI). Fede pateó un impecable centro que fue conectado por Tony, un centrojas con llegada y gol.

La estantería de Simbada comenzó a desmoronarse.

La estantería de Simbada comenzó a desmoronarse. Además, Simbada padeció de muy poca fortuna. Ocurrió lo que nunca pasa: Borja se equivocó en una salida, un mal pase fue cortado por sus rivales, que hicieron una combinación veloz y dejaron a Fede -otra vez el intratable- solo para el segundo gol, que contó con una buena colaboración del golero Tití, que no estuvo en su habitual nivel. Mas allá del error, Borja merece todos los honores: su actuación no fue de las mejores, pero asistió engripado, en medio de una jornada que despuntó con un insoportable viento frío de más de 30 nudos.

Borja se perdió sobre el final una de las ocasiones más claras: conectó de cabeza un centro, el arquero dio rebote, le quedó franco al zaguero que de volea la mandó por encima del travesaño. 

De allí que su calificación no puede bajar de 8 puntos.La victoria de Old Boys tuvo varios dueños. El centrodelantero Bene fue una de las figuras que tuvo a maltraer a la defensa de Simbada junto con el incansable Pato, Toni y Paul, pilares de la victoria por goleada. Y cuando les tocó entrar, Martín y Ale aportaron lo suyo: experiencia y buen pie.Simbada no tuvo la prestancia de otras mañanas.



Se notó la ausencia de Diego, jugador callado pero con gran presencia en el fondo. Sufre de viejas lesiones de las que se está recuperando. También faltó el peso de Marcelo, que sufre una dolorosa talalgia. Y no pudo asistir Ian, que dio parte de enfermo por la mañana. Mariano volverá recién contra Matacos en el último partido, tras cumplir su injusta suspensión y tras ser dado de alta de su fractura de clavícula. Ayer nuevamente se lo vio corriendo por las canchas auxiliares y miró a los juveniles.

Tití, con su estampa guerrera,  ¿pudo hacer más? 

Tití no estuvo a su propia altura. De cinco goles, se comió dos. Por eso, sólo pudo obtener el 60% del puntaje, un 6. Maseta exhibió su intenso amor propio, pero no siempre su habitual velocidad acompañó al amor. En cambio impartió muchas órdenes que saturaron, entre otros, al Negro: “Corre”, “cerrate”, “volvé”, “bajá”, “subí”.

Maseta en el área: ¿demasiados chocolates? 

El cambio de los Alpes suizos por el Río de la Plata lo afectó y según sus compañeros no estuvo a su nivel, que habitualmente es 6 puntos. Y por eso, este cronista lo califica con un 5,75. Borja regaló una pelota que terminó en el segundo gol. Tal vez fue psicológicamente determinante, pero su voluntad aun estando con unas líneas de fiebre lo eximen de la crítica.



 El Bebe habló más de lo que jugó, aunque siempre voluntarioso se las ingenió para marcar como pudo sobre su punta. El Oso fue un motorcito que puso y metió, pero sus esfuerzos no se tradujeron en buen funcionamiento. El Negro corría y corría, quitó muchas pelotas, acompañado por Nico, de buena actuación, pero no acertaron a conectar bien con el centrodelantero Maxi.

Maxi: un delantero que sigue creciendo

 Juampi cumplió con lo suyo, que es la marca, aunque no se halló en el medio campo con la distribución y el juego asociado. Falto un enganche en Simbada.Con tantas insuficiencias, Old Boys fue más. Simbada fue superado siempre por un rival que exhibió capacidad para ensamblar todas sus líneas, construir un patrón de juego, darle volumen a su ataque y ser letal en el arco de enfrente. ARMANDO PAREDES